El puerto de Arbazal aparece documentado ya en el siglo XIII como enclave importante del Camino Real. Así, la casona conocida como Mesón de los Cistercienses habría sido en su origen una venta o albergue de peregrinos que funcionaría como casa de postas, es decir, como lugar para reponer fuerzas y cambiar los tiros de carruajes tras la subida al puerto. El edificio, que puede contemplarse en esta fotografía de finales del pasado siglo, data de 1640 y está concebido como un bloque cúbico, con planta rectangular y cubierta a cuatro aguas. Junto con el cabildo de la iglesia de Santa María y la casa con reloj de sol (de cronologia anterior al mesón) constituyen un conjunto ambiental y arquitectónico de enorme interés y que está incluido en el Inventario de Patrimonio Arquitectónica de Asturias.
Anónimo., «Mesón de los Cistercienses a finales del siglo XX», [material gráfico], 1997.
