En un recorrido histórico por el coleccionismo español decimonónico, que en algunos aspectos aún se encuentra por hacer, la colección artística de la Fundación Selgas-Fagalde, radicada en el palacete de El Pito, en la villa costera asturiana de Cudillero, supone un caso excepcional por su singular emplazamiento, por las características del conjunto y por la filosofía coleccionista de sus propietarios. En su creación obraron como imperativos la formación arqueologista e histórica de Fortunato de Selgas y la situación privilegiada como banquero e inversor de su hermano Ezequiel.