Desde finales del siglo XVIII, se sabía que <<el famoso Juan de Uzeta>> había trazado y realizado, en 1612, el primer monumento de la Semana Santa de la Catedral de Oviedo. La noticia, publicada por el padre Risco en el tomo trigésimo noveno de la España Sagrada (tercero y último de los dedicados a la diócesis ovetense), fue incluida por Ceán Bermúdez en las <<Adiciones a las noticias de Llaguno , pasando el tal <<Uceta>> a integrar la nómina de arquitectos célebres por solo una obra, la cual, paradójicamente, ninguno de los arriba citados había alcanzado a ver, pues como refiere el propio Ceán -, <<hay en su lugar otro [ Monumento] de perspectiva>>.