La conquista de Asturias por Roma en tiempos de Augusto constituye un hecho peculiar en el marco de las guerras astur – cántabras: no existe ningún documento escrito o arqueológico relativo a ese periodo.
Sin embargo la administración romana de dicho territorio incidiría sobre las formas de vida de sus habitantes tanto desde la perspectiva económica como social. La integración paulatina de los astures en la organización romana se llevaría a efecto en fases sucesivas: a través de su participación en el ejército (como miembros de tropas auxiliares) y como mano de obra no especializada en las minas de oro romanas.