Arturo del Fresno ha sido calificado por el estudioso de arte fotográfico Crabiffose como «el más ambicioso y exhaustivo cronista que tuvo Villaviciosa, recogiendo la vida de aquellos que se iban y de los volvían; el cotidiano discurrir y los acontecimientos que rompían la monotonía diaria: los festejos y las solemnidades religiosas, las visitas regias, las inauguraciones públicas». Esta fotografía es una muestra de su trabajo: un retrato tomado en su estudio de un joven matrimonio.