Finales del siglo XIII. Bien de Interés Cultural en 1995.
La planta del templo presenta una nave rematada por cabecera cuadrada. De las dos portadas que conserva en la actualidad, la que está abierta a los pies de la nave mantiene su traza tardo románica y está compuesta por un arco de medio punto con rosca lisa, protegida por un guardapolvo sencillo que apoya en jambas decoradas.
En el muro testero se conserva la cornisa original y se cala por una ventana aspillera a cuyos lados sobresalen dos canecillos románicos.
El interior de la iglesia alberga interesantes elementos de su construcción tardo románica. El arco triunfal está compuesto por una doble rosca apuntada protegida por guardapolvo. Los capiteles que coronan las columnas presentan decoración escultórica. El derecho, muestra motivos vegetales y el izquierdo se decora además, con cestería entrelazada y bolas.
Los muros laterales de la cabecera están recorridos en su interior por una imposta en nacela de la que arranca una bóveda de cañón apuntado.
Entre los vestigios del templo primitivo destaca una valiosa pila bautismal situada junto al arco triunfal. Se trata de una estructura monolítica decorada con dos cenefas de dientes de sierra colocada sobre un pie más moderno.